Estos son algunos de los datos de consumo en nuestro país, en los tiempos del COVID-19.

Cuando México se encontraba en la migración de la etapa uno a la dos, se dio un incremento del 153 % en las compras de productos de higiene y medicina preventiva; del 121 % en alimentos; y, del 112 % en productos de limpieza y uso doméstico. En la transición de la etapa dos a la tres aumentaron las compras de alimentos almacenables y de diversos productos para la salud.

En abril, según la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales y la agencia de mercados Nielsen, las personas aumentaron su consumo, con respecto al mismo mes en 2019, de productos de supermercado (frutas y verduras; carnes, pescados y mariscos; así como de abarrotes comestibles y no comestibles), en 4.8 %, desplomándose su preferencia por ropa y calzado (-83 %), y por mercancías generales (-27 por ciento).

Ahora, con la "nueva normalidad" en marcha, las empresas en vías de su futura recuperación deberán contemplar que el estilo de vida de la gente ha cambiado drásticamente en todo el mundo, generando nuevos hábitos y tendencias que a inicios del año eran inimaginables. La población mexicana se está inclinando por métodos de compras en línea, entregas a domicilio y pagos digitales.

La Asociación Mexicana de Venta Online (AMVO) publicó, a mediados de abril, el Reporte 2.0 Impacto COVID-19 en Venta Online México, en el que también demostró que había aumentado el número de personas que “brincó” al comercio electrónico en ese periodo.

De acuerdo con el documento de la AMVO, las categorías de productos en las que por primera vez se ha tenido mayor necesidad de consumir son supermercado (8 %), moda (6 %), así como comida a domicilio, productos para el aseo del hogar, medicamentos y mascotas (estas últimas con el 5 % cada una).

Ahora ya conoces más sobre las tendencias del consumo en nuestro país, donde destaca la compra de servicios y productos en línea.